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    El Hada Del Sauco

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    El viejo señor cuenta un cuento al niño enfermo para distraerlo. En el cuento, el hada del saúco aparece bajo un árbol de saúco y escucha la conversación de dos ancianos que recuerdan su juventud y boda de oro. El hada les recuerda la fecha y se une a la celebración con la familia. Luego, transforma el saúco en un árbol mágico del que sale con el niño para mostrarle su mundo.

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    El viejo señor cuenta un cuento al niño enfermo para distraerlo. En el cuento, el hada del saúco aparece bajo un árbol de saúco y escucha la conversación de dos ancianos que recuerdan su juventud y boda de oro. El hada les recuerda la fecha y se une a la celebración con la familia. Luego, transforma el saúco en un árbol mágico del que sale con el niño para mostrarle su mundo.

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    El viejo señor cuenta un cuento al niño enfermo para distraerlo. En el cuento, el hada del saúco aparece bajo un árbol de saúco y escucha la conversación de dos ancianos que recuerdan su juventud y boda de oro. El hada les recuerda la fecha y se une a la celebración con la familia. Luego, transforma el saúco en un árbol mágico del que sale con el niño para mostrarle su mundo.

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    El viejo señor cuenta un cuento al niño enfermo para distraerlo. En el cuento, el hada del saúco aparece bajo un árbol de saúco y escucha la conversación de dos ancianos que recuerdan su juventud y boda de oro. El hada les recuerda la fecha y se une a la celebración con la familia. Luego, transforma el saúco en un árbol mágico del que sale con el niño para mostrarle su mundo.

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    El hada del saco

    rase una vez un chiquillo que se haba resfriado. Cuando estaba fuera de casa se haba mojado los pies, nadie saba cmo, pues el tiempo era completamente seco. Su madre lo desnud y acost, y, pidiendo la tetera, se dispuso a prepararle una taza de t de sa co, pues esto calienta. !n esto vino aquel viejo se"or tan divertido que viva solo en el ltimo piso de la casa. #o tena mujer ni hijos pero quera a los ni"os, y saba tantos cuentos e historias que daba $usto orlo. % &hora vas a tomarte el t %dijo la madre al peque"o% y a lo mejor te contar'n un cuento, adem's. % (o hara si supiese al$uno nuevo %dijo el viejo con un $esto amistoso%. )ero, *cmo se ha mojado los pies este rapaz+ %pre$unt. % ,!so di$o yo- %contest la madre%. ,Cualquiera lo entiende% *.e contar's un cuento+ %pidi el ni"o. % *)uedes decirme e/actamente % pues debes saberlo % qu profundidad tiene el arroyo del callejn por donde vas a la escuela+ % .e lle$a justo a la ca"a de las botas %respondi el peque"o%, pero slo si me meto en el a$ujero hondo. % Conque as te mojaste los pies, *eh+ %dijo el viejo%. 0ueno, ahora tendra que contarte un cuento, pero el caso es que ya no s m's. % )ues invntese uno nuevo %replic el chiquillo%. 1ice mi madre que de todo lo que observa saca usted un cuento, y de todo lo que toca, una historia. % S, pero esos cuentos e historias no sirven. (os de verdad, vienen por s solos, llaman a la frente y dicen2 ,aqu estoy% *(lamar'n pronto+ %pre$unt el peque"o. (a madre se ech a rer, puso t de sa co en la tetera y le verti a$ua hirviendo. % ,Cuente, cuente% (o har, si el cuento quiere venir por s solo, pero son muy remil$ados. Slo se presentan cuando les viene en $ana. ,!spera- %a"adi%. ,3a lo tenemos!scucha, hay uno en la tetera. !l peque"o diri$i la mirada a la tetera4 la tapa se levantaba, y las flores de sa co salan del cacharro, tiernas y blancas4 proyectaron $randes ramas lar$as, y hasta del pitorro salan, esparcindose en todas direcciones y creciendo sin cesar.

    !ra un esplndido sa co, un verdadero 'rbol, que lle$ hasta la cama, apartando las cortinas. !ra todo l un cuajo de flores olorosas, y en el centro haba una anciana de bondadoso aspecto, e/tra"amente vestida. 5odo su ropaje era verde, como las hojas del sa co, lleno de $randes flores blancas. & primera vista no se distin$ua si aquello era tela o verdor y flores vivas. % *Cmo se llama esta mujer+ %pre$unt el ni"o. 67er's2 los romanos y $rie$os %respondi el viejo% la llamaban 1rada, pero esta palabra no la entendemos nosotros. &ll' en #yboder le damos otro nombre mejor4 la llamamos 8mamita sa co8, y has de fijarte en esto. !scucha y contempla el esplndido sa co. 9ay uno como l, florido tambin, all' abajo4 creca en un 'n$ulo de una era peque"a y humilde. :n medioda dos ancianos se haban sentado al sol, bajo aquel 'rbol. !ran un marino muy viejo y su mujer, que no lo era menos. 5enan ya bisnietos, y pronto celebraran las bodas de oro, aunque apenas se acordaban ya del da de su boda4 el hada, desde el 'rbol, pareca tan satisfecha como esta de aqu. % 3o s cu'ndo son vuestras bodas de oro %dijo4 pero los viejos no la oyeron4 hablaban de tiempos pasados. % *5e acuerdas+ %deca el viejo marino%. *5e acuerdas de cuando ramos ni"os y corramos y ju$'bamos en esta misma era+ )lant'bamos tallitos en el suelo y hacamos un jardn. % S %replic la anciana%, lo recuerdo bien. ;e$'bamos los tallos4 uno e ellos era una rama de sa co, que ech races y sac verdes brotes y se convirti en un 'rbol $rande y esplndido4 este mismo bajo el cual estamos. % S, esto es %dijo l%4 y all en la esquina haba un $ran barre"o4 en l flotaba mi barca. 3o mismo me la haba tallado. ,<u bien nave$aba- )ero pronto lo hara yo por otros mares. % S, pero antes fuimos a la escuela y aprendimos unas cuantas cosas %prosi$ui ella % 3 lue$o nos prometieron. (os dos llor'bamos, pero aquella tarde fuimos, co$idos de la mano, a la 5orre ;edonda, para ver el ancho mundo que se e/tiende m's all' de Copenha$ue y del ocano. 1espus nos fuimos a =rederi>sber$, donde el ;ey y la ;eina paseaban por los canales en su embarcacin de $ala. % )ero pronto me toc a m nave$ar por otros lu$ares, durante muchos a"os. =ui lejos, muy lejos, en el curso de lar$os viajes. % S, ,cu'ntas l'$rimas me costaste- %dijo ella%. Cre que habas muerto4 te vea en el fondo del mar, sepultado en el fan$o. ,Cu'ntas noches me levant para ver si la veleta $iraba- S, $iraba, pero t no volvas. .e acuerdo de un da que estaba lloviendo a c'ntaros, el basurero se par frente a la puerta de la casa

    donde yo serva. ,!ra un tiempo espantoso- 3o sal con el cubo de basura y me qued en la puerta, y mientras a$uardaba all se me acerc el cartero y me dio una carta, una carta tuya. ,1ios mo, lo que haba viajado aquel sobre- (o abr y le la carta, llorando y riendo a la vez. ,!staba tan contenta- 1eca el papel que te hallabas en tierras c'lidas, donde creca el caf. ,<u pas m's maravilloso debe ser- ,.e contabas tantas cosas- 3 yo las estaba viendo mientras la lluvia caa sin cesar, de pie yo con mi cubo de basura. &l$uien me co$i por el talle... % )ero t le propinaste un buen bofetn, muy sonoro por cierto. % #o saba que fueses t . 9abas lle$ado junto con la carta y ,estabas tan $uapo- % y todava lo eres %. (levabas en el bolsillo un lar$o pa"uelo de seda amarillo, y un sombrero nuevo. ,<u ele$ante ibas- ,1ios mo y qu tiempo haca, y cmo estaba la calle% !ntonces nos casamos %dijo l%, *te acuerdas+ *3 de cu'ndo vino el primer hijo, y despus .ara y #iels, y )edro, y ?uan, y Cristi'n+ % S, y todos crecieron y se hicieron personas como 1ios manda, a quienes todo el mundo aprecia. % 3 sus hijos han tenido ya hijos a su vez %dijo el viejo%. #uestros bisnietos4 hay buena semilla. *#o fue en este tiempo del a"o cuando nos casamos+ % S, justamente es hoy el da de vuestras bodas de oro %intervino el hada del sabucal, metiendo la cabeza entre los dos viejos, los cuales pensaron que era la vecina que les haca se"as. .ir'ronse a los ojos y se co$ieron de las manos. &l poco rato se presentaron los hijos y los nietos4 todos saban muy bien que eran las bodas de oro4 ya los haban felicitado, pero los viejos se haban olvidado, mientras se acordaban muy bien de lo ocurrido tantos a"os antes. !l sa co e/halaba un intenso aroma, y el sol, cerca ya de la puerta, daba a la cara de los abuelos. (os dos tenan rojas las caras, y el m's peque"o de sus nietos bailaba a su alrededor, $ritando, ale$re, que habra cena de fiesta2 comeran patatas calientes. 3 el hada asenta desde el 'rbol y se sumaba a los hurras de los dem's@. % )ero esto no es un cuento %observ el chiquillo, que escuchaba la narracin. % 5 lo sabr's mejor %replic el viejo se"or que contaba%. (o pre$untaremos al hada del sa co. % #o fue un cuento %dijo sta%4 el cuento viene ahora. (as m's bellas leyendas sur$en de la realidad4 de otro modo, mi hermoso sa co no podra haber salido de la tetera %. 3, sacando de la cama al chiquillo, lo estrech contra su pecho, y las ramas cuajadas de flores se cerraron en torno a los dos. <uedaron ellos

    rodeados de espessimo follaje, y el hada se ech a volar por los aires. ,<u indecible hermosura!l hada se haba transformado en una linda muchachita, pero su vestido se$ua siendo de la misma tela verde, salpicada de flores blancas, que llevaba en el sa co. !n el pecho luca una flor de sa co de verdad, y alrededor de su rubia cabellera ensortijada, una $uirnalda de las mismas flores. Sus ojos eran $randes y azules, y era maravilloso mirarlos. !lla y el chiquillo se besaron, y entonces quedaron de i$ual edad, sintiendo las mismas ale$ras. =in.

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