Vieja Compañera
Vieja Compañera
Vieja Compañera
No se daba mucho con los compaeros pues profesaba la religin de los Testigos de Jehov y por eso casi nadie departa con ella. Yo era uno de los pocos con que ella se relacionaba. Pasbamos largas horas conversando. Siempre estuve enamorado de ella en secreto pero nunca me anim a decrselo. Adems, la religin nos separaba. Un da ella cay enferma y, como no tena amigos, me llam para que le llevara las tareas. Fui a su casa y la encontr sola. Su padre y su madre haban salido. Estaba hermosa. Luca un pulovercito de hilo escotado y un pantaln a rayas bastante ajustado. Nunca la haba visto vestida as, ya que era ms bien recatada. Pasamos al comedor y mientras le daba las tareas se arrodill en la silla marcando bien sus curvas. Me exit. Me acerqu para indicarle la forma de resolver un algoritmo matemtico y su cercana me hizo descontrolar. La abrac y deslic mi mano hacia su cola. Lanz un suspiro y sin protestar se abraz a m. Comenzamos a besarnos desesperadamente. Met mi mano debajo de su pullover y acarici su espalda. Al llegar a su corpio lo desprend cuidadosamente. Se dej hacer. Se sac el pullover y termin de quitarse el corpio dejando ante mi vista sus dos hermosas tetas. La bes apasionadamente, luego baj hasta sus senos y comenc a succionar y lamer sus pezones. Jadeaba de exitacin. Segu bajando y desprend su pantaln, se lo baj. Tena puesta una bombacha no muy sensual, pero ajustada. Le acarici las nalgas y con mis manos y mi boca se la baj hasta la rodilla. Instintivamente separ las piernas. Comenc a lamer su ombligo y a bajar despacio hasta llegar a los pelos de su pubis. Al llegar all, desesperadamente me empuj para que siga bajando. As lo hice y comenc a lamer su vulva. Sus jadeos se hicieron cada vez ms intensos. Estaba totalmente hmeda. Me tom de los hombros e hizo que me pare. Se sent, me baj mis pantalones y mis calzoncillos, tom mi pene y comenz a chuparlo. Su boca era inexperta, pero igual haca maravillas. Por no saber hacerlo se lo tragaba todo y casi se ahoga, pero sigui lamiendo y chupando, hasta que, sin poder soportarlo ms descargu toda mi leche en su boca. Rebals y cay sobre sus tetas y se escurri por sus curvas. Daniela se puso como loca .comenz a lamer y chupar desaforadamente Me empuj hacia un silln cercano hacindome sentar. Se me tir encima y su vulva comenz a rozar mi pene. De un solo golpe lo introduje en su vagina. Ella comenz a cabalgar frenticamente. Deslic mis manos sobre sus nalgas apretndoselas y abrindola todo lo que poda a la vez que se la meta una y otra vez. Ensayamos varias poses y luego de algn tiempo acabamos al mismo tiempo y camos exhaustos sobre la alfombra Ni bien nos repusimos ella se coloc de lado y comenz a lamer mi pene a la vez que acercaba su vulva a mi cara. Acept la invitacin y comenc a chuparle su hermosa conchita .el 69 fue de novela ya que seguimos lamindonos hasta acabar nuevamente Estbamos en lo mejor cuando de pronto la puerta se abri, instintivamente mir y qued atnito al ver a la madre de Daniela mirndonos con los ojos absortos sin osar emitir palabra. Hija! Qu es todo esto! Dijo en tono de reproche.
Me incorpor y fue entonces cuando la madre de Daniela vio mi aparato. Se qued sin habla y no pudo ya apartar su mirada de l. Se acerc, lo tom entre sus manos, y, ante el asombro de Daniela y mo se arrodill y comenz a chuprmelo magistralmente. Era tanto el placer que senta que me olvid de Daniela y la dej hacer. Le desprend la blusa y de un tirn le arranqu el corpio. Asomaron dos tetas enormes, aunque algo cadas, pero no me importaba. La acost sobre la alfombra y le met mi verga entre esas dos hermosas tetas. Ella con una cancha tremenda las apret para darme ms placer.
Entre ires y venires acab terriblemente y ca ya dbil por todo el esfuerzo La veterana se me abalanz sobre m y con su lengua recorri todo mi cuerpo fue alucinante Yo me dej hacer, pareca estar en el Paraso No s cuanto dur esto porque me qued dormido, completamente relajado. Cuando despert estaba sobre una cama de dos plazas. Quise moverme pero no pude. Mis manos y mis piernas estaban atados a los barrotes Levant la vista y mirndome estaban Daniela y su madre, vestidas con ropas erticas y prontas a abalanzarse sobre m pero esto ya es otra historia. Posted in Cuados, tios, suegras, Filiales, Orgias en familia | 1 Comment