La separación de poderes es un principio fundamental de la democracia moderna. Propuesto por Montesquieu y refinado por los padres fundadores de Estados Unidos, este concepto busca prevenir la concentración excesiva del poder en una sola institución o individuo. James Madison, en el Federalist Paper No. 51, explicó que, en una democracia, cada rama de gobierno debe tener “una voluntad propia” (a will of its own).
Esta idea va más allá de la mera división formal de funciones, pues la “voluntad propia” implica que cada poder del Estado –Ejecutivo, Legislativo y Judicial– debe