Condenada la exnovia de Morad por apuñalar a una mujer en casa del rapero

Una jueza ha condenado a nueve meses de cárcel a la exnovia de Morad, Carolina C., por apuñalar a una mujer con la que el rapero mantenía también una relación. Los hechos ocurrieron el 27 de junio de 2021 en casa del cantante, en la plaza de Europa de L’Hospitalet (Barcelona). La pareja de Morad, que vivía con él en ese domicilio, llegó a las 7.30 de la discoteca y, al encontrarle en la cama con otra mujer, cogió un cuchillo de cocina y le asestó a ella cinco puñaladas, recoge la sentencia, a la que ha accedido EL PAÍS.

“Me cegué”, explicó la acusada en el juicio que se celebró contra ella por un delito de lesiones agravadas, que se castiga con penas de entre dos y cinco años de cárcel. La pena impuesta finalmente ha sido inferior, de nueve meses de prisión, por un trastorno mental transitorio. Cuando vio “cómo su pareja estaba en la cama con otra mujer, sufrió un episodio temporal de arrebato”, señala la titular del juzgado de lo penal número 16 de Barcelona, Sonia Monserrate. Horas antes, además, había consumido alcohol y cocaína en la discoteca junto a unas amigas, tal como detalló en la vista oral.

El ataque fue por sorpresa, mientras la chica y Morad dormían en la cama. Carolina R. se acercó a la cocina, donde cogió un cuchillo de 13 centímetros, y regresó al dormitorio. Asestó a la víctima “unas cinco puñaladas” en el brazo izquierdo, la cadera, la zona torácica y la axila izquierda. Cuando vio que la chica estaba malherida y sangrada, trató de remediarlo. “La auxilió colocándole unas toallas” y presionando para contener la hemorragia y llamó a la ambulancia, según considera probado la sentencia. Meses más tarde, abonó diversas sumas de dinero para indemnizarla y en el juicio aseguró que se “arrepiente” de lo ocurrido.

Las declaraciones de las dos mujeres y de Morad permiten reconstruir los hechos, aunque las versiones no coinciden del todo.

El rapero, que declaró en el juicio como testigo, dijo que la acusada era en aquel momento su pareja pero que “también estaba con Sofía”. La novia aseguró, en cambio, que “no sabía que tenía otra relación paralela” y por eso se enfureció al verle con otra chica. Sobre la agresión, Morad explicó que ya había acabado todo cuando se despertó, por lo que no tuvo que intervenir. La víctima, en cambio, afirmó que Morad fue quien le quitó el cuchillo de las manos a la agresora e “hizo que Carolina no siguiera apuñalándola”.

Morad dijo que su novia no arremetió contra él en ningún momento y detalló que se marchó de casa porque había tenido “problemas con la policía”, unos problemas que aún hoy siguen persiguiéndole: tras ser desterrado del barrio de La Florida de L’Hospitalet por orden judicial, la semana pasada fue detenido después de un altercado por una discusión de tráfico con agentes de la policía local de ese municipio.

Además de la pena de nueve meses de prisión, la jueza ha impuesto a la acusada la prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima durante cuatro años. La víctima dijo que Carolina entró en la habitación gritando “te voy a matar, hija de puta” y precisó que sigue bajo tratamiento psicológico en Francia, donde reside.

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