Alex huye de noche con Maddy y recurre a servicios sociales, donde consigue trabajo en Empleadas domésticas y descubre que sus problemas recién están empezando.
Luego de pasar una noche con Maddy en un terminal de ferri, Alex consigue albergue. Pero los problemas con la custodia y una clienta insatisfecha la llevan al límite.
Mientras lidia con el complejo sistema de asistencia gubernamental, Alex pelea la custodia de Maddy y hace frente a un trabajo que casi la hace tirar la toalla.
Cuando limpia la hermosa casa de Regina durante el Día de Acción de Gracias, Alex se imagina cómo sería vivir con tantos lujos... y lleva su fantasía un poco más lejos.
Alex va a trabajar a la casa de la madre de un conocido delincuente de la zona y se llena de recuerdos. Luego, logra descubrir la causa de la tos de Maddy.
Decidida a enviar a Maddy a una guardería mejor, Alex busca con urgencia otro lugar para vivir, un proceso complicado debido a los beneficios asistenciales que recibe.
Alex escribe sobre sus clientes, incluida una pareja que vive separada. Entretanto, lidia con su compleja situación de vivienda y el delicado estado mental de Paula.
En medio de una serie de tropiezos, Alex explora la posibilidad de estudiar, enfrenta la crisis de salud de Paula y le ofrece ayuda a Regina.
De vuelta en el inicio, Alex busca un refugio y ayuda legal, y se da cuenta de cuánto ha perdido de sí misma con el tiempo.
Gracias al apoyo de un grupo de terapia y escritura creativa, Alex lucha por su futuro y enfrenta a Sean por la custodia de Maddy.