Fiesta de palabras

Como quieren oler una flor, ¡los bebés plantan una! No saben cómo se llama el sitio de la naturaleza donde crecen las flores. ¿Los ayudas?

Los bebés se lo pasan pipa explorando la naturaleza y eligiendo sus cosas favoritas. Pero Lulu se queda muy triste cuando su nueva amiga sale volando.

Lulu no entiende por qué los bebés tienen que dormir de noche y despierta a los demás para montar en el tren.

Kip y Franny se pelean mientras juegan a las palabras opuestas. Podrías ayudar a Franny a aprender algunas palabras para el juego.

Lulu no puede dormir sin su almohada, pero tampoco quiere las de los demás porque no le gustan sus formas.

Los bebés necesitan tu ayuda para aprender los nombres de las formas: así Franny podrá construir una torre con sus bloques nuevos.

Lulu no puede participar en el juego porque no entiende las normas. ¿La ayudas a aprender algunas palabras para que pueda jugar?

Como está lloviendo, los bebés tienen que jugar en casa tranquilitos, pero Kip y Lulu hacen tanto ruido que molestan a Franny y a Bailey.

Franny y Kip dicen que pueden hacer el mejor helado del mundo. Para salir de dudas, Bailey y Lulu los van a probar y a decidir cuál es el mejor.

El nuevo juguete de Kip es tan divertido que no quiere jugar fuera con él... hasta que Bailey le enseña un montón de cosas que puede ver, oír, oler y tocar al aire libre.

A Franny le gusta escalar, a Lulu tirarse por el tobogán y a Bailey montar en su patinete. Kip no sabe cómo se llama lo que a él le gusta, ¿lo ayudas?

Mientras los otros corren y saltan, Bailey prefiere sentarse a la sombra de su árbol preferido. Necesita tu ayuda para encontrar un movimiento que le guste hacer.

Los bebés deciden montar un grupo de música, pero tanto Franny como Lulu quieren tocar el tambor, así que habrá que encontrar el instrumento adecuado para Lulu.

Lulu ha estado jugando fuera con Raffe, su juguete favorito, y ahora está sucio y roto. Los bebés aprenden palabras contrarias para ayudar a arreglar a Raffe.

Franny está aprendiendo a usar el orinal y los otros bebés intentan que se divierta haciéndolo. Aprovechando la ocasión, todos amplian su vocabulario con nuevas palabras.

Franny, Bailey y Kip se enfadan con Lulu porque se ha cogido todas las galletas. Lulu necesita ayuda para aprender nuevo vocabulario sobre los buenos modales.

Los bebés deciden dedicarse un rato al arte. Franny, Lulu y Bailey pintan y hacen fotos, pero desconocen cómo se llama el tipo de arte con el que Kip está entretenido.

Como hace mal tiempo, los bebés deben quedarse a jugar dentro. Franny, Kip y Lulu juegan a vaqueros, pero Bailey no se divierte porque los truenos le dan miedo.

¿A qué van a jugar hoy los bebés? Como no parecen ponerse de acuerdo, tendrán que aprender lo valiosa que es la amistad.

Franny quiere compartir su tarta de cumpleaños con Bailey, Kip y Lulu, pero debe resolver cómo cortar el pastel en cuatro pedazos iguales.

Es la hora de la siesta y Lulu busca un buen lugar para que Raffe, su juguete favorito, descanse. Bailey, Franny y Kip le ayudan a dar con el rincón ideal.

Kip y Bailey no saben de dónde viene el mal olor que hay en el parque. Para resolver el misterio, deciden convertirse en detectives.

Franny, Kip, Bailey y Lulu juegan a imitar los movimientos de algunos animales y se dan cuenta de que les faltan palabras.

Los bebés se van de pícnic, pero a Kip no le gustan los bichos. Sus amiguitos le enseñan cosas sobre los diferentes tipos de insectos que ven por allí.

Los bebés fingen ser animales hambrientos que se persiguen entre sí, y usan su imaginación para aprender cosas sobre animales marinos.

Los bebés quieren divertirse haciendo cosas diferentes y Franny da con la solución para poder compartir el mismo juego: jugar a las tiendas.

Los bebés juegan a los detectives para resolver los misterios de las novedades en la casa. ¿Qué emocionante sorpresa les espera?

Los pequeños trabajan mucho y bailan a lo loco para ayudar a Tilly a aprender cosas divertidas. ¡Pero ella también tiene algo especial que enseñarles!

Es hora de jugar fuera, y los chicos salen haciendo el paso tonto. Algo después, ¡Tilly da unos grandes pasitos!

¿Qué quiere Tilly? Como los bebés no hablan chino mandarín, no la entienden bien. Pero Paly Palabra y un juguete muy curioso les echarán una mano.

El reloj Tic Tac tiene un pequeño accidente y Kip y Lulu lo reparan. Pero, como se han quedado sin guía, los bebés no saben qué toca hacer a continuación.

Todo el mundo quiere jugar con la pequeña Tilly, pero algunos bebés todavía tienen que aprender a comprobar que sus juegos sean seguros y amables.

Lulu se siente excluida porque es muy pequeña y no consigue hacer lo mismo que sus amigos. Pero las cosas mejoran cuando usa las palabras y su imaginación.

A Lulu y a Tilly les cuesta mucho compartir sus juguetes especiales. Y Paly Palabra tiene que intervenir cuando las dos pequeñas empiezan a pelearse.

Franny tiene un día horrible y nada le sale bien. Los bebés trabajan en equipo para encontrar las palabras en español y en mandarín que describen sus sentimientos.

Kip aprende por las malas que no puede distraerse cuando está a cargo de Tilly. ¿Cómo arreglarán el desastre? Trabajando en equipo... ¡y con burbujas!

¡Kip, Bailey y Tilly están listos para despegar! Los bebés usan su imaginación para explorar el espacio exterior y, además, aprenden sobre el sol y la luna en mandarín.

Franny aprende que no pasa nada por no ser siempre valiente cuando admite que los dinosaurios le dan un poco de miedo. ¿A lo mejor bailar consigue animarla?

Kip tiene hambre, pero los bebés tienen que guardar todos sus juguetes antes de comer. ¡Seguro que una búsqueda del tesoro hace que recoger sea más rápido y divertido!

¡Franny finge ser un monstruo que se ha comido todos los colores! ¿Podrán los bebés descubrir el secreto para que todo lo que está en blanco y negro recupere su color?

Tilly recibe mucha atención y Lulu se siente un poco excluida. Pero con un baile loco y un retrato suyo hecho por Franny, seguro que Lulu vuelve a sonreír.

A Lulu le encantan los fideos, pero los demás bebés quieren comer arroz para variar un poco. Al final encuentran la solución ideal con la ayuda de Paly Palabra: ¡sopa!

Bailey se levanta con la trompa taponada y estornudando, así que los bebés se aseguran de que tome su medicina y descanse para que se ponga bien pronto.

Cuando Lulu se da un golpe en el codo mientras corretea por el cuarto de juegos, Tilly enseña a los bebés a abrazar y besar en mandarín para que una pupa no duela tanto.

Gracias a sus superpoderes y a unas capas preciosas, los bebés se convierten en los Saltadores Morados y las Máquinas Verdes. ¿Pero en qué equipo quiere estar Tilly?

El cartero ha traído una caja de cartón. Después de vaciarla, los bebés la convierten en una casa y juegan a ser una familia que vive en su interior.