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Mito: La narcocultura conlleva a una vida de placeres, lujos y felicidad de forma rápida,

sencilla y sin consecuencias.

Desmitificación del mito: La narcocultura conlleva a una vida de supuestos placeres, lujos y
felicidad a costa de riesgos, muertes y violencia.

Hipótesis:
La narcocultura destaca la riqueza, el poder y el estatus social de quienes participan de ella,
minimizando la violencia, el sufrimiento humano y su impacto negativo en la sociedad,
generando anhelos que van desde el consumo y apropiación de los contenidos simbólicos,
hasta la incorporación en actividades del narcotráfico.

Evidencias:
Desde el siglo pasado, la narcocultura ha aumentado drásticamente la injerencia en la cultura
popular en torno a la influencia de la glorificación del estilo de vida del narcotráfico. Estas
expresiones culturales han promovido una mitificación sobre un estilo de vida relacionado al
crimen organizado, omitiendo las consecuencias reales del crimen.
En un estudio realizado por América Becerra y Diego Hernández, concluyen que, de acuerdo
a una encuesta que realizaron a alumnos de la Universidad Autónoma de Nayarit, señala que
la presencia de exponentes culturales como las narco-series y narco-corridos ha crecido
exponencialmente en la población joven, y concluye que la relación directa con la fascinación
de esta cultura, obviando los lujos, el dinero y el estilismo, es la relación directa del
narcotráfico con el poder: según una investigación publicada por la revista Science, el crimen
organizado en la sociedad mexicana cuenta con 175.000 integrantes, siendo el 5to empleador
en el país. Una estadística que se puede interpretar como una presencia importante en la
sociedad de que la población en situaciones marginadas y de necesidad, considera que el
crimen organizado es una salida obvia a sus necesidades.
Las series, música y literatura que promueve esta mitología han incrementado en la década de
los 80’s, y estos valores culturales y subculturas han fomentado la unión a el cartel de
Sinaloas, así como replicaciones en toda Latinoamérica: “se volvió una gracia imitar a los
capos de la mafia portando armas, exhibiendo oro y joyas, y presumiendo la valentía.” (p.
192). Esta gracia es el síntoma cumbre de una sociedad narco culturizada y con una
percepción distorsionada.
Referencias:
Instituto Nacional de Estadística y Geografía. INEGI. (s. f.). Sala de prensa.
https://www.inegi.org.mx/app/saladeprensa/noticia.html?id=8273#:~:text=En%20202
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Narrativas individuales

● Carlos Gabriel Santiago López-A01277878

Niños: Una niña de 15 años de edad. Nace y vive en una zona marginada del estado de
Jalisco. Su familia cuenta con escasos recursos económicos. Asiste a la secundaria con
regularidad, hasta el día en el que, debido a una intervención criminal, la escuela cierra y,
siendo la única institución accesible de educación para su familia, y termina desertando del
colegio.

Debido a la necesidad, su familia la manda a buscar trabajo. Sin embargo, debido a su


juventud, la marginación y su nivel de estudios, le resulta imposible buscar un empleo.

En melancolía, decide visitar su vieja secundaria, en dónde conoce a uno de los criminales
que intervinieron su secundaria, la cual ahora es una base de una supuesta unión de crimen
organizado, que se dedican a repartir drogas que reciben de un cartel mayor del estado.

El chico induce a la chica, por medio de halagos y cortejos, a acercarse a él. La chica, en
desesperanza y negación, decide hacerle caso.

A partir de este punto, comienza la aventura de esta joven adolescente que se involucra con
un grupo de jóvenes influenciados por una narcocultura fuerte de la localidad, así como de
violencias, traiciones, drogas, identidades, familia y amor.

Papás: La narcocultura es una consecuencia cultural; sus principales medios de difusión son
los medios musicales, cinematográficos, seriales y literarios: La Reina del Sur, los
narcocorridos, Pablo Escobar, “El Cochiloco”, etc. que exponen de manera fantástica e
idealizada el estilo de vida del crímen organizado, específicamente, del narcotráfico.

Este tipo de expresiones ha suscitado una creciente mitología en torno a esta vida, que
termina influyendo en la ideología juvenil en torno a sus objetivos de vida, sus héroes, y sus
modelos a seguir. Esto provoca que mucha población joven se vea influenciada por este tipo
de pensamientos, así como de la búsqueda y el acercamiento al crímen organizado de manera
constante y, en el peor de los casos, conduciendolos a adentrarse en el crímen organizado con
expectativas irreales y actitudes criminales.

● Diego Humberto García López-A01278300


Niños: En el tranquilo pueblo de Vallecito, un día llegó Don Narciso, quien tenía un
sombrero muy grande y botas brillantes. Muchos jóvenes, incluido Pablo, se sintieron
atraídos por las cosas emocionantes que traía en su maleta. Pablo decidió seguir a Don
Narciso en sus aventuras, pero pronto descubrió que esas aventuras no eran tan divertidas
como parecían. En una fiesta, Pablo se asustó mucho cuando llegaron personas que querían
causar problemas. Entonces, Pablo entendió que la felicidad que buscaba en esas emociones
fuertes no era real. Decidió regresar a su hogar y descubrió que la verdadera felicidad estaba
en estar con su familia y disfrutar de las cosas simples de la vida, como jugar y reír juntos. Y
así, Pablo aprendió que es mejor buscar la felicidad en lugares seguros y llenos de amor.

Papás: El narcotráfico, una industria clandestina de enormes dimensiones, continúa cobrando


un precio devastador en vidas humanas y comunidades enteras, desencadenando violencia,
corrupción y destrucción. Quienes se adentran en este mundo enfrentan riesgos extremos,
desde enfrentamientos armados hasta represalias brutales. A pesar de las promesas de riqueza
y poder, el costo personal y social es exorbitante, con familias destrozadas y comunidades
sumidas en el miedo. La lucha contra el narcotráfico requiere una acción coordinada y un
esfuerzo por abordar las causas de la adicción y la desigualdad, para romper este ciclo de
violencia y destrucción.

● Juda Mirrael Aguilar Rosales-A01277886

Niños: Juan es un niño de 12 años al que le gusta mucho escuchar corridos tumbados, pues le
interesa mucho la vida de placeres, lujos y felicidad que se describe que llevan los
protagonistas de las canciones. Juan pertenece a una familia de escasos recursos, en la cual
hay 3 miembros, su mamá, su hermano menor y él. A Juan le gustaría adentrarse en la vida
del narco para poder obtener todo lo que escucha en las canciones y poder ayudar a su
familia, entonces se acerca con su amigo Javier, pues sabe que el tío de Javier está dentro del
mundo del narco y puede darle información sobre el tema. Javier después de preguntarle a su
tío, va con Juan y le dice lo siguiente: “El narco conlleva una vida de supuestos placeres,
lujos y felicidad, pero a costa de riesgos, riesgos como la muerte o terminar en la cárcel”.
Juan después de escuchar eso, estuvo pensando muchos días y considerando si era una buena
idea, y llegó a la conclusión de que no valía la pena obtener dinero de manera fácil a cambio
de poner en riesgo su vida. Entonces prefirió seguir esforzándose en la escuela, para que en
un futuro pueda apoyar a su familia con un empleo como profesionista y además, de manera
honesta y sin peligros de por medio.
Papás: Es bien sabido que para los niños es atractivo todo lo que escuchan y ven en los
medios de comunicación sobre el narcotráfico, pues en ellos se glorifica o romantiza el estilo
de vida de las personas que están asociadas con el tráfico de drogas. El detalle aquí es que los
pequeños solo ven las cosas buenas que se quieren mostrar en este tipo de expresiones
artísticas, como lo es una vida de placeres, lujos y felicidad de forma rápida, sencilla y sin
consecuencias. Todo esto es real, excepto la parte de que no hay consecuencias, ya que si las
hay y son muy trágicas; de acuerdo a las personas inmiscuidas con el narco, es sabido que si
entras en este mundo, solo hay dos maneras de terminar, una es muerto y la otra es en la
cárcel. Estas consecuencias son las que deberíamos de hacerles ver a los niños si es que han
pensado o piensan en tener una vida relacionada con el narco, para que puedan reflexionar y
pensar si vale la pena tener una vida con dinero fácil, pero que el tiempo que dure, sea corto
porque te vas a morir o te van a llevar a la cárcel.

● Karime Gabriela Flores Ángeles-A01276542

Niños: Había una vez en un lejano pueblo, un hombre llamado don Pedro, que siempre lucía
ropa de marcas, tenía carros lujosos y regalaba dinero a todos. Los niños del pueblo lo
admiraban y soñaban con ser como él algún día.

Pero lo que no sabían era que don Pedro estaba involucrado en actividades peligrosas. Se
dedicaba al narcotráfico, una vida llena de riesgos y violencia. Aunque parecía tener todo, su
vida estaba llena de secretos oscuros y peligros constantes.

Un día, un niño llamado Juanito, que solía mirar con envidia a don Pedro, descubrió la verdad
detrás de sus aparentes lujos. Vio cómo la policía arrestaba a don Pedro y cómo sus amigos se
enfrentaban en violentas peleas por el control del territorio.

Juanito entendió entonces que la vida de aparente felicidad y lujo que don Pedro mostraba no
era más que una ilusión. Se dio cuenta de que la narcocultura conlleva a una vida de
supuestos placeres, lujos y felicidad, pero todo esto a costa de riesgos, muertes y violencia.
Aprendió que la verdadera felicidad viene de vivir una vida honesta y pacífica, rodeado de
amor y amigos verdaderos. Y así, Juanito decidió seguir un camino diferente, lejos de la
influencia del narcotráfico, construyendo su propia historia, llena de valores y principios.

Papás: La narcocultura es un fenómeno que glorifica el estilo de vida asociada con el


narcotráfico, retratándolo como algo glamoroso y emocionante. Promueve la idea de qué
involucrarse en el mundo del narcotráfico puede llevar a una vida llena de placeres, lujos y
felicidad instantánea. Sin embargo, por el contrario este estilo de vida conlleva grandes
riesgos, incluyendo la posibilidad de violencia extrema, pérdidas humanas y legales, y la
destrucción de comunidades enteras. Es importante comprender que la realidad del
narcotráfico es mucho más oscura y peligrosa de lo que se presenta en todos los medios de
difusión, y que involucrarse en ella puede tener consecuencias devastadoras tanto para
quienes participan directamente como para quienes los rodean. Por lo tanto, es esencial que
como adultos, estén atentos a las señales que pueden indicar que sus hijos están siendo
influenciados por la narcocultura. Deben hablar abiertamente con ellos sobre los peligros y
las consecuencias de involucrarse en este mundo, fomentando en su lugar, valores de
honestidad, trabajo duro y respeto por la ley. Además, deben ofrecerles alternativas, positivas
y saludables para canalizar su energía y ambiciones, ayudándoles a construir un futuro sólido
y prometedor, lejos de la tentación del narcotráfico.

● Kristopher Aguilera Gutiérrez-A01276602

Niños: Había dos abejas que buscaban el éxito y el reconocimiento de sus seres amados por
sus logros. La primera abeja llamada Juan era un soñador, en busca de tener su propio panal y
tener una familia en la cual se pudiera respaldar, la segunda era Cholito, que al igual que Juan
buscaba tener su propio panal, pero a diferencia de Juan él la buscaba a cualquier costo, sea
bueno o malo, tanto que empezó a juntarse con un grupo de abejas que consiguen lo que
querían lastimando a otros o quitandoselos de las manos, Cholito comenzó a gustarle este
estilo de vida y poco a poco fue subiendo de rango dentro de este grupo. Cuando obtuvo el
suficiente poder comenzó a quitarle los panales a las demás abejas y haciéndolas producir
miel para ellos, y así Cholito cumplió su sueño mediante el miedo y violencia. Al paso del
tiempo las malas acciones de Cholito llegaron a las abejas justicieras que trabajando juntas
llevaron a Cholito a la justicia por todo el daño que causaron a otras abejas.

A diferencia de Cholito, Juan comenzó a trabajar duro y comenzó a crear su panal poco a
poco, con la ayuda de otras abejas y obteniendo lo necesario mediante lo que conseguía con
la miel que vendía, poco a poco Juan fue consiguiendo por su buena miel y por la honestidad
hacia sus clientes. Al paso del tiempo mediante trabajo duro, honestidad y ayuda de buenas
influencias, Juan logró cumplir sus sueños.

Papás: La narcocultura puede afectar negativamente a los niños de diversas maneras. Al


glorificar figuras delictivas y normalizar la violencia y el crimen, puede distorsionar su
percepción de lo correcto y lo incorrecto, y desensibilizarlos hacia comportamientos
peligrosos. Esto puede llevar a que algunos niños vean el estilo de vida asociado con la
narcocultura como deseable o aspiracional, aumentando el riesgo de que se involucren en
actividades ilegales o violentas. Además, esta exposición puede erosionar su respeto por la
autoridad y la ley, socavando los valores fundamentales que son esenciales para su bienestar
y desarrollo saludable. Es crucial que los adultos estén atentos a estas influencias y trabajen
para contrarrestarlas con valores positivos y una educación adecuada.

● Ruth Molano Rivera A01276762

Niños: Había una vez un colorido bosque de mariposas donde habitaban animales que vivían
en armonía. Todos los días un sabio búho reunía a los jóvenes para contarles una historia y
darles lecciones importantes de la vida. Un día decidió contarles un relato sobre un grupo de
animales que vivían en un valle lleno de lujos y riqueza, donde todos los días disfrutaban de
banquetes exquisitos, joyas y todas las comodidades que se pudieran imaginar. En ese valle
vivía un animal que se dedicaba a vender una planta llamada “Relámpago Verde”, esta planta
le brindaba a los habitantes una sensación de poder y euforia, pero no todo era bueno, todo
esto debía tener un costo, ya que para mantener ese negocio los animales tenían que mentir,
robar y hasta matar. Con el tiempo, los animales que visitaban el valle quedaban asombrados
por la belleza y el lujo, pero cuando sabían la cruda realidad se preocupaban por la situación.
Es así como el búho sabio les explicaba a los jóvenes que el camino hacia la verdadera
felicidad no estaba pavimentado con lujos y placeres, sino con valores como honestidad,
trabajo duro y respeto por los demás. Al final de la historia, los animales del valle lograron
comprender la verdadera felicidad, comenzando a vivir en paz y armonía.

Papás: La narcocultura es un fenómeno complejo que se ha arraigado en algunas


comunidades, especialmente en aquellas afectadas por el tráfico de drogas y el crimen
organizado. Esta cultura glorifica el estilo de vida asociado con el narcotráfico, presentando a
los narcotraficantes como héroes y modelos a seguir. Utiliza medios de comunicación,
música, películas y redes sociales para propagar una imagen distorsionada de la realidad,
mostrando una vida llena de lujos, poder y placeres instantáneos. Es importante que los
padres comprendan que esta representación idealizada es una fachada que oculta una realidad
mucho más oscura, detrás de los autos lujosos, las mansiones extravagantes y las fiestas
desenfrenadas, se esconde un mundo de violencia, corrupción y tragedia. Los niños y
adolescentes que son seducidos por la narcocultura pueden caer en la trampa de creer que el
camino hacia el éxito y la felicidad pasa por seguir los pasos de los narcotraficantes. Son
atraídos por la promesa de dinero fácil y rápido de una vida sin límites ni consecuencias, sin
embargo, no llegan a comprender que este estilo de vida está lleno de riesgos y peligros.
Como padres es fundamental que estén alerta y que eduquen a sus hijos sobre los peligros y
las consecuencias de la narcocultura, se les debe enseñar a valorar la vida, a tomar decisiones
responsables y a buscar la felicidad en las cosas más significativas que el dinero y los lujos
materiales. Necesitan comprender que el verdadero éxito se construye sobre la base de
valores como honestidad, trabajo y respeto. Al educar a sus hijos de manera consciente y
empática, pueden ayudarles a resistir las influencias negativas de la narcocultura y a construir
un futuro más seguro y prometedor para ellos y para la sociedad.

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