El cautiverio más largo
532 días. José Antonio Ortega Lara ha sufrido el secuestro más largo de la historia de ETA. Fue capturado por la banda en Burgos el 17 de enero de 1996, cuando todavía gobernaba el PSOE y ETA mantenía en un zulo al empresario guipuzcoano José María Aldaya, cuyo secuestro se prolongó durante 341 días, el segundo de mayor duración.Fue liberado ayer más de un año después de la llegada del PP al poder, partido del que es militante. El secuestro de Ortega, con el que ETA pretendía chantajear al Gobierno, partidos políticos y funcionarios de prisiones, ha tenido un final que no se recordaba desde noviembre de 1986, cuando fue liberado por las Fuerzas de Seguridad Lucio Aguinagalde.
Con Ortega Lara ETA pone en su punto de mira a los funcionarios de prisiones. Nunca antes había secuestrado a un miembro de este colectivo de trabajadores. Ahora, cuando su estado de salud le permita reincorporarse a su trabajo, Ortega Lara podrá elegir destino. Así se lo ha garantizado el Ministerio del Interior. Desde los medios cercanos a ETA se ha reiterado que la negativa de Interior a acercar a los presos de ETA a cárceles del País Vasco preconizaba un "duro desenlace".
La familia de Ortega ha esperado impotente estos 18 meses. Su esposa, Domitila Díaz, ha pedido en innumerables ocasiones a ETA la liberación del funcionario. El 17 de mayo les dijo a los etarras que "utilizar a las personas como medio les convierte de gudaris en delincuentes".
Ayer, Domitila tardó en reaccionar a la noticia, tanto tiempo esperada. El ministro del Interior, Jaime Mayor, relató anoche en Antena 3 Televisión que a las 7.05 de la mañana telefoneó al domicilio familiar para dar la enhorabuena a la esposa de Ortega Lara. Ella aún no sabía nada. "¡Cómo se atreve a darme la enhorabuena en estas circunstancias!", fue su primera respuesta, pues conocía sólo la liberación, a primera hora de la madrugada, de Cosme Delclaux.
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