Joven indica las diferencias que hay entre la crianza en Perú y España: pone como singular ejemplo un dibujo animado
Joven indica las diferencias que hay entre la crianza en Perú y España: pone como singular ejemplo un dibujo animado
Redacción EC

Lucía Coblentz, una joven peruana residente en , ha compartido a través de sus redes sociales interesantes observaciones sobre las notables disparidades en la crianza de los niños entre Perú y España. En la siguiente nota te contaremos cómo lo hizo utilizando como referencia un dibujo animado.

CÓMO UNA JOVEN INDICÓ LAS DIFERENCIAS QUE HAY ENTRE LA CRIANZA EN PERÚ Y ESPAÑA

Una joven peruana, Lucía Coblentz, residente en Madrid, compartió a través de sus redes sociales su experiencia como niñera en España, resaltando notables contrastes en la crianza de los niños entre su país de origen y su lugar de residencia actual.

De acuerdo con su relato, la crianza en España se caracteriza por una estricta regulación en el uso de la tecnología por parte de los niños, con un control riguroso sobre el tiempo de exposición a pantallas electrónicas, una práctica que contrasta con la situación en Perú.

Además, señaló que en el contexto español se enfatiza en el aprendizaje de idiomas desde la infancia y se promueve la independencia y autonomía de los niños desde temprana edad, aspectos que difieren de las prácticas comunes en el Perú

CÓMO UNA JOVEN USÓ UN DIBUJO ANIMADO PARA EJEMPLIFICAR LAS DIFERENCIAS

Para ejemplificar las diferencias en la crianza entre Perú y España, Lucía Coblentz recurrió a la popular serie animada “Peppa Pig”.

Según su testimonio, en España el acceso de los niños a programas como “Peppa Pig” está sujeto a un estricto control parental, con familias que limitan el tiempo de exposición a solo un capítulo de la serie o incluso lo restringen por completo.

Además de ello, destacó que cuando se veía esta serie, incluso la veían en otro idioma.

Esta práctica contrasta con la situación en Perú, donde el uso de dispositivos electrónicos por parte de los niños puede ser menos regulado.

El uso de este ejemplo ilustra las diferencias culturales en la percepción y manejo de la tecnología en la crianza de los niños entre ambos países.

POR QUÉ LOS NIÑOS NO DEBERÍAN SER EXPUESTOS A LAS PANTALLAS A TEMPRANA EDAD

La exposición temprana de los niños a pantallas electrónicas plantea preocupaciones significativas debido a sus posibles efectos negativos en el desarrollo físico, mental y emocional de los niños. En primer lugar, el uso excesivo de dispositivos electrónicos puede afectar el desarrollo cognitivo de los niños, limitando su capacidad para concentrarse, aprender y resolver problemas de manera efectiva. La sobreexposición a pantallas también puede interferir con el desarrollo del lenguaje y la comunicación, ya que reduce el tiempo dedicado a la interacción social y al juego creativo, actividades fundamentales para el desarrollo infantil.

Además, la exposición prolongada a pantallas electrónicas puede tener un impacto negativo en la salud física de los niños, contribuyendo a problemas como la obesidad, la falta de ejercicio físico y trastornos del sueño. El tiempo sedentario frente a las pantallas reemplaza las oportunidades de juego activo y movimiento, lo que puede aumentar el riesgo de problemas de salud a largo plazo. Además, la luz azul emitida por las pantallas puede interferir con la producción de melatonina, la hormona del sueño, lo que dificulta que los niños concilien el sueño y tengan un descanso adecuado durante la noche.

Por último, la exposición a contenido inapropiado o violento en las pantallas puede tener un impacto negativo en el bienestar emocional y psicológico de los niños, aumentando la ansiedad, el miedo y la agresividad. Los niños pequeños son especialmente susceptibles a la influencia de los medios de comunicación, y la exposición a imágenes y mensajes perturbadores puede causarles confusión y estrés emocional.